Quizás hayas visto el artículo de Paco Nadal y ¡ya lo has decidido!: este verano vas a hacer el Danubio en bici. Pero te agobia pensar en cómo llegar al punto de partida, cómo llevar la bici y también cómo volver a casa, entonces quizás te interese esta entrada.
Tanto si partes de Donaschinguen (la fuente del Danubio), como de Passau (en la frontera con Austria):
En coche
La opción más flexible y cómoda, con la posibilidad de acortar/alargar la ruta asu entojo. Hay que contar con unos cuatro días de viaje en coche como mínimo (ida/vuelta), más un día en tren para volver desde Viena. Opción barata a partir de 3 personas, aún pernoctando durante el viaje. El coche se puede dejar en un parking exterior del Riedsee Camping, a 2 km de Donaschinguen, o en uno de pago en Passau (buscar en parkopedia.de).
En tren
Llevando bicicletas, la combinación de trenes desde España hasta Alemania es complicada por los numerosos transbordos. En los ferrocarriles franceses y los alemanes se pueden ver las opciones incluyendo la de no desmontar la bici. Un ejemplo: Hendaya-Paris (TGV), Paris-Estrasburgo (TER), Estrasburgo-Offenbourg (Regional Express alemán), Offenbourg-Donaueshingen (Regional Express), son 2 días de viaje con noche en Paris, precio unos 220 euros más la noche en Paris y sin contar el transporte a Hendaya. Quienes vivan en las comunidades del este, por lógica geográfica lo más fácil sería tomar un TGV en Perpignan, pero éstos no admiten bicis.
En avión
Es la opción por la que nosotros nos decantamos. Es rápida y barata. Volamos al aeropuerto Basilea-Mulhouse-Friburgo (ya contamos las ventajas de este aeropuerto), cruzamos la frontera franco-alemana en bici para coger el tren a Offenburg en Weil am Rhein, transbordo y directo a Donaueshingen. También se puede volar a Estrasburgo, a Munich o a Stuttgart.
Para regresar de Viena, varias compañías conectan la capital austriaca con algunas ciudades españolas. En el mismo aeropuerto se puede comprar una caja especial para el transporte de la bici (35 euros), aunque algunos ciclistas optan por comprar plástico de burbujas (Luftpolsterfolie) y cinta adhesiva, en general cuela. Una pista ciclable une el aeropuerto al centro de Viena
En los aviones está permitido llevar las bicis con un recargo que varía entre 40 y 70 euros. Hay que desmontar la bici (mira la entrada estupenda en el blog de ConAlforjas) y meterla en una caja de cartón. Las cajas se pueden conseguir gratuitamente en tiendas de bicicletas. Finalmente hay que llevar todo los bultos al aeropuerto ¡Ojo! Las baterías de bicicletas eléctricas están prohibidas.